Encuesta de Pagos Corporativos en Asia 2022
El año 2021 se caracterizó por una recuperación económica interrumpida en medio de nuevos brotes de la variante COVID-19, lo que llevó a las empresas de Asia-Pacífico a seguir siendo acomodaticias en la concesión de plazos de crédito. Los plazos de pago medios aumentaron de 68 días en 2020 a 71 en 2021, ya que un mayor número de empresas concedieron plazos de crédito más largos, según la Encuesta de Pagos Corporativos en Asia 2022. De los 13 sectores, sólo el textil y el energético informaron de un acortamiento de los plazos de crédito en medio de la subida de los precios de los insumos, especialmente de la energía y las fibras, ejerciendo una mayor presión de costes en estos dos sectores.
La mejora de las condiciones económicas en 2021 contribuyó a un notable descenso de la duración de los retrasos en los pagos en toda Asia-Pacífico, pasando de 68 días de media en 2020 a 54 días en 2021, el nivel más bajo en 5 años. La proporción de encuestados que experimentan retrasos en los pagos se mantuvo estable en el 64% frente al 65% del año anterior. Entre las nueve economías cubiertas, los retrasos en los pagos se acortaron más en Malasia y Singapur. Por el contrario, China fue el único país que registró un aumento de los retrasos en los pagos, y fue también el país con el mayor retraso medio en los pagos.
Sin embargo, la encuesta puso de manifiesto algunas preocupaciones. El porcentaje de encuestados que mencionó un aumento del importe de los atrasos subió al 35% en 2021, frente al 31% del año anterior. Además, un mayor número de empresas informaron de retrasos de pago ultralargos (ULPD) de más del 10% de la facturación anual, con este aumento impulsado en gran medida por China, donde la ya elevada proporción del 27% en 2020 aumentó al 40% en 2021.
La proporción de ULPDs aumentó ligeramente en Australia y la India, mientras que se estabilizó o disminuyó en las otras seis economías, con una caída significativa en Hong Kong. La gran mayoría de los ULPD no se pagan nunca y, por tanto, los riesgos de tesorería tienden a aumentar cuando estos ULPD representan más del 2% de la facturación anual de una empresa.
Aunque la mayoría de los encuestados mostraron optimismo sobre las perspectivas económicas, ya que el 71% espera que el crecimiento económico mejore en 2022, existen crecientes riesgos a la baja para el crecimiento. Las continuas interrupciones en la cadena de suministro, la escalada de las tensiones geopolíticas, los elevados precios de las materias primas y la subida de los tipos de interés, han mermado las expectativas de negocio de un mayor número de empresas, y un menor número de encuestados prevé una mejora de las ventas y del flujo de caja para el próximo año.
La Encuesta de Pagos Corporativos de Asia de Coface 2022 se realizó entre noviembre de 2021 y febrero de 2022.
Cubrió casi 2.800 empresas de nueve mercados y 13 sectores ubicados en la región de Asia-Pacífico.
